Hoy era el dia en que nuestros amigos Carlos/Yolanda y Francesc/Rosa volvian para España asi que decidimos dejar para la tarde la visita por la Habana y aprovechar el poco tiempo que nos quedaba con ellos.Nada más salir del barco tienes que pasar el control de la aduana donde miran y remiran el pasaporte y tu foto.Mucho cuidado con lo que llevais ya que no se puede sacar comida del barco ni llevar determinadas cosas.Por ejemplo, a nuestro amigo Javi lo retuvieron por llevar un movil con gps.Menos mal que todo se aclaro pronto.
Tras este registro te encuentras con las "oficinas de cambio" que es donde nosotros cambiamos el dinero de euros a pesos convertibles.El cambio no me acuerdo exactamente cual era.Mucho cuidado con el dinero que os dan de cambio, ya que como comento Carlos, a alguna persona la "timaron", aunque sigue creyendo que el dinero que faltaba era por la comision.A la salida del puerto Carlos había quedado con el chico que el fin de semana anterior les había enseñado la Habana en calesa. Debemos de dar las gracias a Carlos por presentarnoslo ya que este chico resultó ser un guia excelente y desde entonces un gran amigo.Nosotros negociamos con él el precio de dos calesas para el dia siguiente pero eso lo contare mas adelante.Tambien os dejo su foto por si alguien lo quiere contratar.Es 100% de fiar.
Despues de este encuentro nos dirigimos al mercadillo que esta a 5 minutos a pie.El mercadillo no es muy grande pero tiene muchas cosas tipicas y bonitas, la mayoria hechas por ellos mismos.Los precios son baratos y lo del regateo funciona pero tampoco hay que pasarse.Lo mejor es que en vez de regatear "negocieis" con ellos.Nosotros llevamos un monton de frasquitos de colonia, botes del barco del Champú y gel, pasta de dientes,barras de labios para las mujeres,etc.Según nos explicó la chica del puesto donde compramos la mayor parte de los regalos, ellos en parte prefieren estas cosas a dinero ya que con el no pueden comprarlas.No penseis que ellos te piden nada, al contrario.Le enseñas todo lo que tienes para que cojan lo que mas necesiten y te piden solo una cosa.Por eso, si os acordais durante el crucero id guardando todos los botecitos que no useis para luego regalarlos alli.Ya vereis lo contentos que se ponen.
Despues de tanta compra estabamos muertos de sed asi que nos fuimos todos a la Bodeguita del medio que esta cerca de alli para tomarnos el ultimo mojito de despedida.
Luego volvimos al barco a comer y a las tres nos despedimos de nuestros amigos que regresaban.Fue una despedida triste, pero seguro que pronto nos volvemos a ver ¿no chicos?
Despues de comer, volvimos andando hasta la plaza del capitolio, para poder verlo bien.
Por el camino, veiamos las calles desiertas de coches pero con mucha gente en la calle bailando, cantando o simplemente viendo la vida pasar.
Se ve que son gente humilde pero no por eso pierden la sonrisa. Despues de un paseo por la plaza, decidimos coger un medio de transporte para ir a ver la fortaleza y el espectaculo del "cañonazo de la nueve" asi que que mejor medio de transporte que "el coco taxi". Alli en la plaza habia muchos asi que negociamos con tres de ellos una ruta de dos horas acabando en la fortaleza. Nos dijeron que ok a todo y alli que nos fuimos a ver La Habana vieja.
Pasamos por la Floridita, el hotel nacional haciendo una paradita alli:
Tambien vimos el malecon dando la casualidad que en ese momento pasaba por alli "el camello"
y un monton de cosas mas parando al final en la heladeria "coppelia", famosa por la pelicula Fresa y chocolate. Alli, habia una enorme cola de cubanos esperando su turno para comprar un helado (solo tienen 1 o dos sabores).Para los extranjeros, no habia cola aunque te cobran por el mismo helado el doble y tienen tb 1 o dos sabores.
Cuando acabamos los helados y nos dirijimos a los cocotaxi para ir ya a la fortaleza, nos encontramos con que los conductores estaban murmurando algo y al llegar nosotros se callaron. Nos dejeron que ellos nos dejaban alli, que no nos llevaban a la fortaleza porque estaba muy lejos y el cocotaxi no llegaria.Nos enfadamos y les dijimos que eso no era lo acordado. Ellos seguian en sus trece y decian que no nos llevaban asi que les dijimos que no les pagabamos y que ibamos a ir a buscar a un policia para ver que haciamos. Al final, accedieron a regañadientes y decidieron llevarnos.
Es cierto que el cocotaxi no puede ir a la fortaleza por un tunel que la une con el centro, por lo que tuvimos que dar un enorme rodeo de mas de media hora. A nosotros no nos importo porque vimos toda la parte no turistica y un monton de sitios bonitos y curiosos.
Llegamos a la fortaleza casi al atardecer, asi que les pagamos a los del cocotaxi, les dimos una buena propina por el esfuerzo de llevarnos alli y nos fuimos a comprar el ticket de entrada. La fortaleza, no tiene mucho interes salvo por las preciosas vistas. (aqui nosotros con el crucero de fondo).
Cada vez venia mas gente, asi que nos fuimos a la zona de los cañones donde se iba a hacer lo del cañonazo.
A las nueve en punto, dieron la señal y casi nos quedamos sordos. Esto es una tradicion ya que antes se usaba para que todo el mundo supiera la hora que era.
Ya de noche, nos daba miedo alejarnos mucho de alli y no sabiamos muy bien como volver al barco. Al final decidimos coger un taxi antiguo ya que un señor nos lo ofrecio y nos parecio bien el precio. Fue muy divertido ya que el coche era muy antiguo y enorme, tanto que iban delante 3 personas y atras cuatro.
Llegamos al crucero con el tiempo justo de cambiarnos de ropa y llegar a cenar. Esa noche, hubo gente que se fue al cabaret tropicana o a las salas de musica a bailar pero nosotros nos quedamos a disfrutar de la penultima noche en el barco.
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